Una mujer está internada en terapia intensiva por hantavirus en Bariloche
Se encuentra con asistencia respiratoria y su cuadro es grave. En primera instancia, creían que se trataba de una gastroenteritis, sin embargo, ante la evolución de los síntomas realizaron una PCR y confirmaron las sospechas.
Una mujer de 29 años contrajo hantavirus y se encuentra internada con asistencia respiratoria en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Ramón Carrillo de Bariloche. Los médicos advirtieron que si bien su condición es grave, los parámetros clínicos “son alentadores”, según informó Diario Río Negro.
La paciente trabaja como mucama en un hotel del Cerro Catedral. Concurrió a la guardia de una clínica privada días atrás, con fiebre, dolores abdominales y diarrea. Ante la sospecha de un cuadro de gastroenteritis, le indicaron Reliverán. El malestar persistió y acudió entonces a la guardia del hospital público con los mismos síntomas y además, dificultad respiratoria.
Ante la evolución de los síntomas, se realizó una PCR para hantavirus que confirmó las sospechas.
“Se le hizo una radiografía, análisis clínicos y se la derivó al área de Cuidados Intermedios. En pocas horas, su evolución requirió pasarla a terapia intensiva por las dificultades respiratorias y la falla de otros órganos. Desde hace tres días está con asistencia respiratoria mecánica”, detalló Víctor Parodi, médico de la Secretaría Técnica de la Zona Sanitaria.
Personal de Salud Ambiental recorrió la zona del Cerro Catedral y en particular el área de tareas de la paciente. Tal como indicaron ante un caso confirmado, se hace una historia de los últimos 45 días de la paciente. En este caso, se aislaron 8 personas de su familia, cercanas con las que compartía algún viaje y algunos compañeros de trabajo. Los primeros análisis de los contactos estrechos son negativos. Pero lo cierto es que son entre 30 y 45 días de seguimiento.
Respecto al error en el primer diagnóstico en un centro privado, Parodi admitió que “la mujer consultó por síntomas gastrointestinales, como diarrea y fiebre, en primera instancia. No permitía sospechar en hantavirus hasta que el proceso evolucionó hacia la terapia”. Y agregó que “la mayoría de los casos de hantavirus han tenido un par de consultas previas. El comienzo es inespecífico”.
Fuente Diario Río Negro