Luego de que el directorio defina el cierre de atención del edificio de SEROS Delegación Esquel, los jubilados que ocupan pacíficamente el edificio advierten que es un "apriete".

En las oficinas de Esquel quedó una guardia policial y los jubilados, que permanecen en el hall del edificio. Los empleados habían levantado las oficinas la semana anterior.

Los ocupantes expresan con carteles "aquí deben ser atendidos" los afiliados.

"No puede ser tan irresponsable de hacer trasladar a los afiliados, en su gran mayoría con dificultad en salud, 22 kilómetros, con el costo y el riesgo que ellos tienen".

La palabra de Rosita Contrera, que confirmó una presentación judicial por el abandono del edificio y por abandono de persona.