Hoy tengo ganas de hablarles de algo que nos afecta a un porcentaje muy alto de las mujeres en Argentina, también a los hombres pero hoy voy a hablar de chicas. El talle de las prendas que angustia y estresa a tantas mujeres y enoja a otras.

En mis talleres siempre empiezo diciendo la importancia de usar el talle adecuado, tanto para las mujeres más delgadas como para las más gordas, el talle es importantísimo. Sin importar el tipo de cuerpo que tengas queda mejor que la prenda no ajuste, no quede apretada y mucho menos tirante.

Soy fan de la moda francesa y algo que aprendí de ellas es que una blusa un talle más del que nos correspondería es mucho más sexy que una blusa ajustada. En general las chicas con cuerpos delgados suelen abusar de las prendas ajustadas creyendo que las favorece, y en realidad  lo que hace es dejar todo al descubierto perdiendo la elegancia.

En el otro extremo están las chicas que, aun queriendo encontrar talles, no lo logran, porque la industria nacional no se ocupa de ellas. Si encontramos alguna marca que lo haga, siempre en blanco, negro y gris, dejando los colores y las telas más lindas para los talles medios y pequeños.

De ninguna manera estoy hablando de salud, tanto los extremadamente delgados como los extremadamente gordos suelen tener problemas de salud asociados y no voy a hablar de ellos acá, porque no soy médica ni estoy en condiciones de profundizar en tal sentido.

En mis años de experiencia en venta de indumentaria, en asesoramiento y como consumidora he visto cantidad de mujeres con perfectos estudios de laboratorio, saludables, no entrar en los talles L de las marcas más importantes del país.

Desde mi perspectiva esto tiene dos aristas, por un lado el riesgo de producir una cantidad de talles elevado y no poder venderlo; no es lo mismo producir talle S, M, L que producir, S, M, L, XL y XXL. El costo y la inversión se tornan más riesgosos. Aunque hay un gran mercado en el país para todos los talles, es más fácil ir a lo seguro, a los talles más vendidos.

Pero por otro lado, uno más mezquino y agresivo, (por suerte cada vez más fuera de tiempo, al menos en los países más evolucionados en su mirada social), existen marcas que no quieren vestir personas fuera de sus estándares de belleza. Entonces las marcas que más nos gustan muchas veces no hacen talles para personas gordas porque no quieren que se identifiquen los gordos con su marca.

¿No te parece un horror? Si, es un horror, pero así pasa, y así hay muchas jóvenes y mujeres sufriendo por esto. De a poco va cambiando y cada vez más marcas amplían su curva de talles, y sino lo hacen, surgen nuevas que si piensan en la diversidad. Muchas influencers como Ashley Graham, han visibilizado esta problemática encontrando eco en muchos diseñadores como Victoria Secret o Dolce & Gabbana.

En Argentina aún cuesta y en el interior del país más, pero los consumidores tenemos la posibilidad de exigir lo que necesitamos y les aseguro que el poder es tan grande que puede forzar a una marca a cambiar. Hoy podemos comprar on line, elegir y que te lo envíen a casa, si te gusta coser o tenes una conocida que cose podes hacerte a medida, no dejes que los estándares impuestos te agobien. Busca marcas, mira en las redes, consultá a especialistas, y ponete lo que quieras cuando quieras.

Y vos, sino tenés este problema con los talles, mira a tu alrededor y pensá si alguien cerca tuyo lo tiene y está sufriendo, quizás podamos hacer algo como consumidores para tener una industria textil un poquito mejor.

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