En un domicilio de calle Fontana al 1000 la policía desbarató un kiosco de venta de estupefacientes al menudeo. Durante el procedimiento quedó detenido a disposición del juzgado un sujeto a quien se le tomará declaración en las próximas horas.

También se secuestró una cantidad no especificada de cocaína y marihuana, un celular, balanzas, dinero, y otros objetos de interés para la investigación.

La investigación, que lleva alrededor de dos meses, pudo comprobar las sospechas de los investigadores mediante material fotográfico y filmaciones que detectaron movimientos continuos de jóvenes y adolescentes en la vivienda.