La próxima semana se conocerá el veredicto en el juicio contra militar por amenazas coactivas
Se trata del proceso judicial contra un ex integrante de la jefatura del Regimiento de Caballería N°3 del Ejército Argentino por los delitos de coacción y abuso de autoridad militar que tuvieron como víctimas a tres soldadas voluntarias entre 2017 y 2018.
El pasado lunes 25 de septiembre comenzó el juicio oral y público en el predio del Escuadrón 36 de Gendarmería Nacional, en Esquel. Al frente estuvo el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Comodoro Rivadavia, integrado por la Dra. Ana María D'Alessio como Presidenta y los Dres. Mario Gabriel Reynaldi y Luis Alberto Giménez.
El Fiscal Federal Mariano Sánchez, indicó en diálogo con EQSnotas.com que fueron cinco jornadas de juicio oral y público con gran cantidad de testigos. La etapa concluyó después de presentar la prueba y queda pendiente para la semana que viene, vía remota, los alegatos.
El funcionario fiscal destacó que es la primera vez que la Justicia Federal ventila un caso de estas características, que involucra a la fuerza de seguridad. Agregó que la sentencia “puede ser un pronunciamiento judicial ejemplificador que llame a la conciencia considerando que no solo tienen que ver con la violencia de género, si no como prevenir y castigar los abusos de gente con mayor jerarquía”.
Recordó que son dos los hechos que se le imputan a Castro Ramos, quien fuera el segundo jefe del Regimiento de Esquel. Uno es el delito de amenazas con coacciones, “se enunciaban amenazas de salir de baja, de cortarles la carrera contra la prestación de favores sexuales a lo que las víctimas no accedieron”. El otro delito es un “abuso funcional porque como consecuencias de esas amenazas y negativa el oficial encarnó una serie de ejercicios abusivos y reiterados sobre una de las soldados”.
Por su parte la abogada Mariela Llanquinao, querellante en representación de la víctima, destacó el trabajo del tribunal en perspectiva de género que asiste y acompaña con profesionales del área de psicología.
Comentó que las víctimas fueron citadas para dar su testimonio y en ese momento estuvieron acompañadas por una psicóloga. Además, se tomaron otras medidas como que no se encuentren con el imputado y que se desarrolle sin presencia de público.
Asimismo, consideró que “la prueba recolectada es suficiente y ha sido variada” por lo que están dadas las condiciones para que se dicte una condena. También resaltó que llegar a un juicio oral y público “con un caso de estas características es un precedente”.