Fueron condenadas por mentir en un juicio
Dos mujeres fueron testigos de la defensa en un juicio. Sus declaraciones realizadas bajo juramento de decir verdad, fueron falsas.
Dos mujeres fueron testigos de la defensa en un juicio realizado el año pasado. Sus declaraciones realizadas bajo juramento de decir verdad, fueron falsas.
La Fiscalía inició una investigación, la que concluyó con un juicio abreviado y una suspensión de juicio a prueba respectivamente.
Por la Fiscalía intervino el fiscal Marcelo Crettón, por la defensa Sofía Torres, la audiencia fue dirigida por el juez Jorge Criado.
Una de las imputadas, Sara Soledad Andrada, ya había obtenido a una suspensión de juicio a prueba en un proceso anterior. Por ese motivo, pese a lo bajo de la pena en expectativa, no pudo acceder a una solución alternativa del conflicto y decidió afrontar su responsabilidad en un juicio abreviado. Se le impuso la pena mínima de un mes de prisión en suspenso más la inhabilitación absoluta por 60 días, prevista en el art. 19 del CP. La pena de inhabilitación, entre otras consecuencias implica la privación del ejercicio del derecho a votar.
La coimputada accedió a una suspensión de juicio a prueba por un año. En ese plazo deberá cumplir treinta horas de trabajo voluntario no remunerado en el Hogar de Ancianos de Esquel. Además realizará una donación de mil pesos a la misma institución.
El hecho
El 8 de Agosto del año pasado, ambas imputadas asistieron en calidad de testigo ante el tribunal Oral Colegiado, bajo la presencia del Dr. Martin Zacchino, en el juicio oral y público celebrado en el caso en que fueron juzgados Diego Marcelo Urrutia y Roy Osvaldo Sides.
El juez les advirtió de las penas previstas por el Código Penal Argentino, para el falso testimonio y les tomó juramento de ley. En sus declaraciones, hicieron referencia a supuestos trabajos realizados por un herrero en la casa de una de las víctimas de robo y la relación de este con un coimputado.
En el mismo juicio se demostró que no existió tal vinculación y por lo tanto los dichos de las testigos que se apoyaban en ella también eran falsos. La mentira se motivó en favorecer la situación procesal de los imputados de acuerdo a la teoría del caso planteada por la defensa, ejercida en aquel juicio por el defensor particular Horacio Hernández.