Rusia 2018: el equipo albiceleste mostró mas de lo mismo
El análisis de las primeras fechas del Mundial realizado por el director técnico y Jugador profesonal Jesús Torregrosa #Opinión
Por Jesús Torregrosa para EQSnotas.com
Arrancó el evento que tanto esperamos los futboleros: la Copa mundial de la FIFA Rusia 2018. Con un acto más sencillo de lo que muchos esperaban, criticado por unos y celebrado por otros, espectáculo cuyo análisis dejamos a los programas de variedades, destaco lo breve y sobrio de los discursos de los presidentes de Rusia y de la FIFA, los cuales dieron paso a la estrella de la competición: la pelota.
El comienzo del grupo A, nos presentó un equipo ruso que entró a la cancha con mucha actitud para cambiar la imagen adquirida en la etapa previa al torneo donde no ganó ningún partido, y motivado por un estadio abarrotado de simpatizantes, fue a buscar el encuentro desde el principio con unas transiciones rápidas como principal virtud, y jugadores eficaces en zona de ataque, destacando a Godovin como el generador de juego. En frente estuvo un pálido equipo de futbol como el seleccionado de Arabia Saudita, dirigido por el argentino Juan Antonio Pizzi, que no tuvo ningún tipo de reacción ni de juego. En lo personal esperaba un poco más de acción, pero lo mostrado por el combinado árabe fue triste, y el resultado fue consecuente con lo visto en la cancha.
En el otro encuentro del grupo, donde se suponía a priori, se enfrentarían los dos equipos más fuertes, Uruguay y Egipto, el primero por su jerarquía y el segundo por el presente su principal referente Mohamed Salah, fue un partido parejo en lo táctico pero con un equipo sudamericano que dio algunas muestras de poder ofensivo a través sus delanteros Suárez y Cavani, quienes hicieron que el portero egipcio tuviese un par de actuaciones importantes. La no presencia de Salah, produjo el efecto que todos esperan, que solo se viera lo táctico y la voluntad del equipo africano, pero sin una claridad y enfoque ofensivo como se lo da el Faraón, y permitió que Uruguay ganara a lo Uruguay, en el último minuto, por arriba y con mucha garra charrúa. En resumen, este grupo esta nivelado por lo bajo y el triunfo obtenido por Rusia, genera una tensión con Egipto y a Uruguay para demostrar con mayor claridad quien debe ser el primero del grupo.
En el grupo B, se vio un contraste claro en lo futbolístico, dónde Marruecos e Irán mostraron que son los equipos más débiles, con un partido cauteloso, de poca agresividad y con un gol en contra que definió el juego a favor de los iraníes.
En el otro encuentro, nos topamos un partido con muchos goles y emociones, de dos selecciones diferentes en el juego pero con cualidades muy notorias. La selección de España juega un fútbol vistoso con fundamento en la posesión de pelota y pequeñas sociedades, mientras Portugal basa su trabajo en un orden defensivo y apuesta a un contragolpe rápido, pero su principal jugador Cristiano Ronaldo tuvo una tarde mágica, al marcar los tres tantos con los cuales los lusos lograron la igualdad ante los españoles.
Esta primera fecha dejó bien parado al juego de España y el excelente momento de Ronaldo, pero habrá que ver si eso le alcanza a Portugal como equipo.
La jornada del sábado tuvo acción desde muy temprano con el grupo C. A primera hora jugaron Francia y Australia, encuentro en el que salieron victoriosos los europeos, pero sin ser el equipo contundente que se esperaba, y con más protagonismo del VAR, mecanismo a través del cual fue sancionado el primer penalti del mundial, y a la postre, el primer gol del onceno galo.
Para completar el grupo, saltaron a la cancha los seleccionados de Dinamarca y Perú. Para los suramericanos era su regreso a la gran cita después de 36 años. El encuentro exhibió un fútbol alegre y ofensivo propuesto por los dirigidos por Gareca, a quienes les faltó mayor claridad en ataque, y sobre todo eficacia, la cual sí tuvo el equipo europeo que mostró un fútbol práctico y ordenado, materializado en la única conquista del encuentro a través del delantero Yussuf Poulsen.
En el grupo D, hizo su presentación otro de los favoritos de los mundiales cómo es la selección Argentina, que de la mano de Lionel Messi quieren ganar la copa. Frente a ellos estaba el debutante Islandia que no les hizo fácil el partido, poniendo en cancha lo visto en la Eurocopa de 2016 y eliminatorias al torneo, un fútbol basado en el orden, la paciencia, líneas cortas y una marca por momentos individual a pelota y escalonada en otros, buscando una transición rápida en contra golpe.
En mi concepto, el equipo albiceleste mostró más de los mismo, falta de idea futbolística, su dependencia en extremo de Messi y los errores repetitivos del entrenador en leer los partidos y dónde claramente prioriza su "idea" por encima del equipo, situación preocupante porque en los días que no le salen las cosas a su estrella, como ocurrió hoy, donde incluso erró un penal, el equipo no resuelve las situaciones de juego y deja una imagen llena de falencias tanto en defensa cómo en ataque.
Aún así, esto recién empieza y creo que el equipo va a mejorar como lo hizo en ediciones anteriores, y que individualmente es superior y tiene con que pelear siempre y cuando entiendan, sobre todo el entrenador, que ésto este es un deporte de equipo y hay que potenciar el grupo y seguramente el mejor jugador aportará lo suyo y será el plus.
Los otros dos integrantes de este grupo, saltaron a la cancha con la intención de aprovechar la ventaja del resultado de Argentina para ubicarse con la mejor perspectiva. Croacia, con jugadores en gran momento como Modric, Kovacic y Rakitic, y un juego de conjunto de toque preciso y práctico, sacó provecho de estas virtudes y ganó el partido frente a un duro equipo nigeriano que como típico representante africano, expuso un fútbol rápido y basado en su fortaleza física, pero que claramente les hace falta esa cuota mental y de trabajo para discernir en la toma decisiones dentro del campo de juego, pero que aún así siempre será un rival de temer.
Para la jornada dominical hay mucha expectativa para ver en acción a dos de los máximos favoritos, Brasil de la mano de Neymar y un estilo de juego ofensivo que propone Tite, busca arrancar de gran manera su carrera al título. Antes, hará su presentación el actual campeón del mundo, Alemania, selección que sin ninguna duda es la de mejor proceso en la última década por su trabajo en la base, pero con un equipo que para esta ocasión solo arriba con siete (7) de los jugadores que alzaron la copa hace cuatro años.
Amanecerá y veremos, dijo el ciego.