Artistas que son gestores, un familia de talleristas, grupos de estudiantes de teatro que son habitué, la conexión del gas, una nueva consola de sonido, más equipamiento, base de datos, público propio y ávido de aprender y de disfrutar, espectáculos de todo el mundo, talleres con disciplinas nuevas... Un gran segundo año para el teatro independiente La Juntadera, que hace de a poco pero entre todos, y eso es lo más importante, "que junte".

Nacido con el apoyo del Instituto Nacional de Teatro y de un grupo de vecinos de Esquel que pusieron plata de sus bolsillos, Cambia La Papa y Efectos Colaterales adquirieron el edificio y comenzaron un camino que además de avanzarlo, lo han ensanchado. El teatro independiente conlleva además pagar las facturas, pensar cómo mejorar los servicios tanto para el público como para los artistas y además crear, porque ellos también son artistas. Hoy el "núcleo -que algunos llaman "duro - loco" del teatro son los Lic. en teatro, Giovanna Tonegguzzo y Sebastián Pellegrini, el técnico en Comunicación Audiovisual y actor, Mike Álvarez y el músico Edison Martínez.

Para festejar este segundo aniversario, durante noviembre habrá festejos especiales con música y teatro, además de invitados de la región.

"El teatro nos Junta"

La Juntadera logró el difícil desafío de sostenerse a lo largo del año con una agenda que para este segundo año no sólo ofreció espectáculos y talleres de teatro, sino también de otras disciplinas que han ido conformando un espacio de encuentro y creación.

Son varias las razones por las que La Juntadera genera unión. Algunos que comenzaron colaborando con el teatro hoy eligen el arte como principal actividad. También la Varieté del Aniversario une a varios artistas locales de Esquel y Trevelin: "La del año pasado también fue puntapié para la puesta de una nueva obra, pero no sólo nos encuentra entre los hacedores sino también con la comunidad. Por ejemplo la crisis económica creímos que iba a afectar a la asistencia y eso no fue así: durante octubre llenamos la sala, percibimos con mucho afecto el apoyo de la comunidad",  cuenta Giovanna.

A su vez, los institutos de formación artística que han surgido durante los últimos años - este año comenzó el de Teatro - también son muy importantes para el desarrollo de políticas culturales locales. Y La Juntadera está atenta a eso: "Tratamos de generar comunidad, de estar cerca por eso sumamos también descuentos y beneficios para estudiantes y eso por suerte se está notando en la sala, hay gente que se siente parte", agrega Sebastián.

El teatro independiente: Artistas que hacen y gestionan

"Sin romantizar la precariedad en que nos manejamos, también el hecho de que somos todos artistas y a la vez gestores le da un tinte, un color diferente, sabemos lo que hacemos porque lo aprendemos desde ambos lados y valoramos mucho eso como distintivo de La Juntadera", relata Edison.

Él es músico y se sumó este año, pero también colabora todo el grupo Efectos Colaterales, Marina Feldman, Malena de Vita, Sol Ibaldi, entre otros artistas: "Los chicos siempre están", agrega Sebastián. Y es que parte de la dificultad de apoyar es mantenerse: "Nosotros no cobramos por lo que hacemos y tomamos la decisión de poner el dinero que sobra en más inversión", explica Giovanna.

El hecho de que se haya sumado Edison también generó otras apuestas, con la reciente adquisición de una consola de sonido y la presentación de un proyecto en el Instituto Nacional de la Música para adquirir más equipamiento y mantener una agenda en el área.

También Mike se sumó y con el toda una oferta vinculada a la comunicación audiovisual, con talleres de fotografía y difusión artística.

¿Cómo se sustenta el teatro independiente?

Si bien el Instituto Nacional del Teatro les aprobó un subsidio para la adquisición del edificio y recibieron equipo luminotécnico en comodato, el teatro depende de sus asistentes, tanto a talleres como a disfrutar de las obras. Edison cuenta que ahora buscan nuevos horizontes "Este año estamos armando un proyecto para presentar de vuelta en el INT y hacer un ampliación, queremos sumar aulas y algún taller para poder brindar capacitación en lo que es producción artística, necesitamos más iluminadores, titiriteros".

La realidad es que el teatro se sustenta de sus artistas, su público y de los propios gestores de La Juntadera, que ponen horas de su día para que todo funcione. Y los mueve la pasión: "Levantar una pared significa que haremos aulas, nos encantaría tener una pequeña residencia de artistas", cuenta Sebastián, el titiritero, técnico en iluminación y lo que se necesite: "Por la distancia y el costo, es importante tener un espacio para recibirlos y colaborar porque los gastos en una gira son casi como ir a pérdida y todo eso significa que los aristas terminan invirtiendo para garantizar el derecho a acceder a la cultura", agrega Giovanna.

Un teatro por el acceso a la cultura

La Juntadera aspira a generar una red de gestores de la región, además de vincularse con la delegación provincial del INT para crear el proyecto "La escuela del espectador" en Esquel.

Tienen expectativas también en acercar vínculos con el Municipio: "Queremos trabajar más en conjunto y que nos apoye desde la difusión", dice Giovanna, a lo que Edison agrega: "lo que buscamos es generar opciones y no ir en contra, colaborar con otras salas tratando de no pisar otras funciones, sabiendo que otros espacios no tienen la regularidad que tenemos nosotros".

Lo cierto es que de un año a otro también avanzaron en generar con mayor antelación la programación, están construyendo una base de datos y mantienen abierto el espacio para quien quiera usarlo: "Por ahora nuestro criterio es decir que sí a todo. Queremos que encuentren en La Juntadera un espacio para expresarse, aprender, juntarse y ser recibidos con calidad y mucho afecto", concluyó Giovanna.