La responsable del Área Programática Esquel, Dra. Patricia Laborde, se refirió a la atención y rápida respuesta del personal de salud que se desempeña en el Hospital de El Maitén ante la intoxicación por monóxido de carbono de alumnos y docentes de la escuela de Buenos Aires Chico. 

Laborde indicó que el nosocomio de esa localidad fue desbordado ante la cantidad de pacientes que asistieron pero todo el personal se puso a disposición de manera inmediata y brindaron una rápida respuesta. "No hubo ninguna complicación y todos están estables", aseguró. 

Desde Esquel enviaron un móvil con tubos de oxigeno y también los hospitales de alrededores pusieron a disposición para poder asistir a todos los pacientes que se están recuperando y ninguno sufrió complicaciones graves. 

Recordó que se atendieron por guardia 58 personas -de entre 12 y 18 años-, de los cuales hay 19 internados con sintomatología leves. Otros 7 niños fueron dados de alta con pautas de alarma, es decir que se les realiza un seguimiento ante cualquier síntoma que pueda aparecer. 

Monóxido de carbono

La doctora comentó que el monóxido de carbono es un gas tóxico y los chicos son más afectados. El monóxido compite con el oxigeno e ingresa más rápido al organismo provocando diferentes complicaciones y hasta la muerte. 

Señaló que es imperceptible, no da ninguna señal hasta los primeros síntomas, que pueden ser dolor de cabeza, mareos, vómitos. Afecta a nivel bascular, del corazón, del cerebro y genera una pauta de alerta ante cualquier otra situación que pueda surgir.