Remisería de Inclusión Social pide que los habiliten para trabajar
Los integrantes de la empresa piden una prórroga para comprar un auto adaptado. Mientras tanto quieren comenzar a trabajar para reunir el dinero
El Concejo Deliberante de Esquel habilitó a fines del año pasado una remisería operada por personas con discapacidad. Se trata de la cooperativa de Remises de Inclusión Social (RIS) que, desde hace casi un año está sin poder trabajar debido a los requisitos impuestos por la ordenanza que los habilita.
La Remisería de Inclusión Social, que fue aprobada por ordenanza el 17 de diciembre pasado en el Concejo Deliberante de Esquel, aún no pudo comenzar a operar, primero por cuestiones administrativas y actualmente porque aun no adquirieron los vehículos adaptados que estipula la ordenanza.
Vale destacar que la ordenanza sancionada en diciembre autoriza al Departamento Ejecutivo a otorgar la habilitación comercial a la remisería, pero "condicionada" a una serie de requisitos entre los cuales aparece:
La empresa social ya cumple con los dos primeros puntos pero aún no consiguen los vehículos adaptados, por lo cual solicitan al Concejo Deliberante y al Municipio de Esquel, les den una autorización provisoria para trabajar con los automóviles con los que cuentan y un plazo máximo de un año para adquirir los móviles adaptados.
Así lo explicó uno de los integrantes de la Remisería quien señaló que "lamentablemente no podemos costear el valor de esos vehículos que tienen un precio superior a los 5 millones de pesos".
"Hoy somos una empresa que está inscripta en la AFIP, pero por la ordenanza que salió en su momento, no podemos empezar a trabajar por no contar con los vehículos para personas con discapacidad", remarcó y recordó que nunca tuvieron la habilitación comercial a causa de este requisito.
"Nosotros solo les pedimos que nos den un año para poder comprar un vehículo. Hoy estamos sin trabajar, somos doce familias en las que hay personas con discapacidad que pueden trabajar como chofer y como operador", expresó.
"Queremos que nos autoricen a trabajar, tenemos todo, solo nos falta el vehículo que no es barato. Los tiempos de los concejales no son los mismos que los nuestros, necesitamos trabajar", concluyó el integrante de la empresa de remises.