El hallazgo de gran cantidad de restos óseos humanos enterrados dentro de bolsas en una playa ubicada a 30 km de Puerto Pirámides generó versiones encontradas, y aún se esperan respuestas más concretas por parte de las autoridades.

Dos hombres circulaban en sus cuatriciclos por esos médanos cuando se toparon semi-enterrados en la arena unos cráneos que sobresalían de tres bolsas negras y huesos diseminados en el lugar. Al observar bien contabilizan alrededor de 15 cráneos con sus huesos.

Los individuos se acercaron a la policía a radicar la denuncia y fueron notificados que iba a acercarse al lugar una comisión especial de Rawson de paleontólogos y personal de Criminalística para verificar el hallazgo.

Más adelante ambos hombres, quienes en un principio iban a acompañar a la delegación hasta el lugar, fueron notificados que finalmente no serían de la partida junto con el mensaje de que "esos huesos -alrededor de 20 esqueletos humanos- pertenecían a un cementerio, habían sido colocados allí para ser investigados por científicos del Conicet/Cenpat y que por cuestiones de clima habían salido a la luz" cuenta el conductor de uno de los cuatriciclos, extrañado por la situación de que no hubieran estado protegidos con ninguna indicación o "cerco".

Asimismo, también fueron informados que el sitio no era de libre circulación, sino que se encuentra dentro de la estancia de la Fundación Vida Silvestre.