En estas fechas gobernadas por el vértigo de la finalización de mandatos constitucionales, y cambio de autoridades, elijo hacer una pausa, para celebrar que hay vecinos conscientes que la palabra política proviene del griego ¨polis¨, que significa ciudad y el que la ciudad, nos pertenece a todos.

Vecinos que no le sacan el cuerpo a su condición de ciudadanos y se atreven a cruzar las fronteras estrechas de su campo de especialización y a intervenir en el debate público, poniendo en el asador todo su prestigio personal y profesional con el fin de defender causas que les parecen razonables y justas.

Yo no sé cómo es el tiempo que nos ha tocado vivir. ¿Qué es lo que lo caracteriza o distingue de otros tiempos?, ¿cuál es el rasgo o los rasgos que lo definen?, ¿por qué razones será recordado en el futuro? No lo sé y dudo mucho que ninguno de quienes lean mis preocupaciones, esté en condiciones de saberlo.

En cierto sentido, hasta me atrevería a afirmar, que nadie sabe en qué tiempo vive. Ese conocimiento sólo lo posee el futuro, o la historia cuando se escriba, nosotros apenas podemos intuirlo

Además, en el fondo, quizá no sea tan importante saber en qué tiempo vivimos. Porque, aunque cada tiempo sea distinto, nosotros los humanos que los transcurrimos, por muy diferentes que parezcamos, siempre somos más o menos los mismos.

Así como también lo son, nuestras pasiones, nuestros sueños, nuestros deseos, nuestros motivos para vivir y para morir. Por eso, porque los seres humanos no cambiamos en lo esencial, es por lo que puede no ser importante saber en qué tiempo vivimos, pero esta idea no debe privarnos de tomar nota de algunos hechos.

Vuelvo entonces al presente, para escribir que, desde hoy 8 de diciembre de 2023, en Esquel, Chubut, República Argentina, el tiempo de los esquelenses, ha asumido un cambio en la vida política de sus instituciones.

Es que, por primera vez en la historia de la Esquel, una mujer presidirá el Honorable Concejo Deliberante de la ciudad. Hecho que entiendo significativo, no solamente para la escribana, Norma Trucco, que de ella se trata, sino para todos los vecinos

Este cambio es el reconocimiento a que las mujeres tienen mucho que aportar en la vida pública, ofreciendo perspectivas diferentes y valiosas, y trabajando por objetivos que beneficien a toda la sociedad.

Pero no es sólo, este tiempo de los esquelenses lo que debe reclamar nuestra atención.

Nos enteramos por estos días, del trabajo silencioso de la Procuradora Fiscal, de la Circunscripción Judicial local, atreviéndose a bucear en la profundidad de las cloacas de una institución opaca, sobre la que, ni la política, ni la justicia (hasta ahora) se han atrevido, a exigir su funcionamiento dentro de la ley y el orden, cómo lo ha hecho esta joven profesional y su equipo de investigadores.

Si algo faltara a mi vaticinio sobre el tiempo de las mujeres, en la vida pública esquelense, y a fuerza de ser justo, no puedo olvidar tampoco, el grupo de valientes vecinas auto convocadas para exigir en todas las puertas institucionales en condiciones de intervenir, que se ordene a la concesionaria de los servicios públicos, ajustar sus prácticas a las prescripciones de las normas y de la Ley que le diera razón de ser.

Todo lo señalado pertenece a nuestro tiempo, y creo que lo distinguen en lo esencial de otros tiempos de la misma vida institucional.

¿Por qué será recordado el tiempo de los esquelenses?, ¿que lo singularizará? Repito que no lo sé, qué tal vez no podamos saberlo, pero me atrevo a vaticinarlo, este nuevo tiempo es el tiempo de las mujeres

Vecinos, "ha llegado el tiempo de las mujeres a la vida pública” esto implica un reconocimiento de su creciente influencia, visibilidad y participación en todos los aspectos de la sociedad, marcando un cambio significativo, que debemos celebrar.

Bienvenido EL TIEMPO DE LAS MUJERES A NUESTRA CIUDAD.

Jorge JUNYENT