La apertura del Período de Sesiones Ordinarias en la Legislatura de Chubut no estuvo exenta de las diferencias entre los referentes políticos de la provincia. 

En medio de su discurso, el gobernador Ignacio Torres sorprendió con una referencia en tono distendido hacia el diputado nacional José Glinski: “Después vamos a hablar, está picante José”, lanzó, dejando entrever las diferencias políticas que marcan el escenario provincial.

La frase no pasó desapercibida, ya que Glinski había manifestado horas antes su rechazo a una posible alianza entre el peronismo y el oficialismo chubutense, una postura que lo distanció de las recientes declaraciones del dirigente Ricardo Sastre, quien sugirió que el justicialismo debería sumarse al armado electoral de Torres de cara a 2025.

En ese contexto, Glinski fue contundente: “El peronismo tiene que representar a los dañados por el Gobierno de Javier Milei”, afirmó, dejando en claro su visión sobre el rol opositor que debe asumir su espacio político. 

Además, según informó El Diario Web, Glinski señaló que el gobernador Torres “está más cerca de Milei” que de encabezar una alternativa opositora.

Con estas declaraciones, el legislador nacional reafirmó su intención de construir un peronismo fuerte y diferenciado, marcando distancia con los intendentes que ya manifestaron su alineación con el mandatario provincial.