Mediante un comunicado desde el Hospital Andrés Isola de Puerto Madryn, informaron que el pasado jueves 9 de septiembre se detectó una temperatura inadecuada durante un breve lapso de tiempo en una de las cámaras que almacenaba al menos 30.000 vacunas (mayoritariamente del Calendario Nacional de Vacunación).

Ante lo acontecido, las autoridades del nosocomio rápidamente presentaron la denuncia para determinar si lo ocurrido se debió a una falla técnica o si hubo una negligencia.

Una vez detectado el hecho, se inició el protocolo de actuación interna que consiste en establecer el stock de dosis y tipos de vacunas almacenadas.

Según informaron, también se procedió a informarle lo acontecido a las autoridades sanitarias tanto provinciales como nacionales. También explicaron que las dosis involucradas en el desperfecto quedaron conservadas y en cuarentena y no serán utilizadas hasta tener una respuestas de las autoridades competentes.

En diálogo con Radio 3, el jefe de la Unidad Regional Madryn, Ariel Jara, indicó que "se están realizando las medidas que corresponden para determinar qué fue lo que sucedió" y agregó que "en principio no podemos hablar de la inutilización de vacunas, sino de un desperfecto en los artefactos que se encargan de mantener la temperatura que requieren las vacunas", detalló.

Asimismo, el comisario contó que se investiga "si se trató de una cuestión técnica o si hubo algún tipo de intervención dolosa por parte de algunos de los operarios". También detalló que "en cuanto se tuvo conocimiento comenzó a intervenir la Brigada de Investigación a hacer entrevistas, se hizo el relevamiento de cámaras y a partir de ahí seguramente en estos días ya arrimarán los elementos reunidos a la Fiscalía para que se tome alguna medida o se concluya respecto que fue lo que sucedió", manifestó Jara.