El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) publicó el nuevo pronóstico trimestral que abarca los meses de diciembre, enero y febrero. Según los datos sobre temperaturas y precipitaciones medias, se esperan marcas superiores a las normales en casi todo el país y menos lluvias de lo habitual en el oeste y sur de la Patagonia. Las proyecciones presentan algunas diferencias con respecto a las anteriores, publicadas en octubre.

Respecto de las temperaturas, hay mayores probabilidades de valores térmicos normales o superiores sobre el norte del Litoral (en Misiones, Corrientes y algunas zonas de Entre Ríos, Santa Fe, Chaco y Formosa) y al sur de la Patagonia, en Tierra del Fuego y la porción sur de Chubut. El resto del país, incluyendo la Ciudad de Buenos Aires, el conurbano y todos los municipios de la Costa Atlántica, tendrá marcas superiores a las habituales pero en comparación con el informe anterior, las chances son ahora un poco menores.

Para definir las tres categorías se utilizan “terciles”, que se obtienen separando en tres partes iguales los datos de, en este caso, la temperatura. Luego, se ordenan de menor a mayor. “Para la temperatura, se puede considerar que el tercil central implica valores de aproximadamente 0.5°C por debajo o por encima del valor medio. Valores por encima o por debajo de ese rango serían temperaturas inferiores o superiores a la normal”, explica el SMN.

Como se observa en el mapa, la mayor parte de las provincias se encuentran en la tercera categoría, con una probabilidad del 45% al 50% de que los valores térmicos sean superiores a los normales. Por otro lado, en las jurisdicciones con temperaturas normales o superiores, ese porcentaje disminuye a un rango del 40% al 45%. Los distintos tonos de colores no hablan de la intensidad del calor, sino de cuán probable es que la categoría domine en los próximos 90 días.

Escasas lluvias en la Patagonia

El informe también advierte sobre precipitaciones inferiores a las habituales sobre el oeste y sur de la Patagonia, desde Neuquén hasta Tierra del Fuego; hacia el este de la misma región se prevé que sean normales o inferiores a la media. En cambio, lo contrario ocurre en las provincias del NOA y la región de Cuyo, desde Jujuy hasta Mendoza, con proyecciones normales o superiores a lo habitual respecto a la caída de agua.

Sobre La Pampa, Provincia de Buenos Aires, CABA, Córdoba, este de San Luis y oeste de Santa Fe se anticipan parámetros normales. Otras tantas provincias permanecen en blanco, esto significa que no hay una categoría (normal, superior a lo normal e inferior) con mayor probabilidad de ocurrencia: Misiones, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Chaco, gran parte de Santiago del Estero norte y este de Santa Fe, y este de Salta.

“Dada la época del año sumado a la baja señal de forzantes de gran escala (El Niño/ La Niña) se espera que continúen predominando las oscilaciones de menor escala (subestacionales y sinópticas), lo cual puede favorecer tanto períodos y/o áreas de eventos de precipitación más intensa que lo normal, como de escasas lluvias”, advierten desde el organismo meteorológico. Recomiendan mantenerse actualizado con los pronósticos diarios y semanales.

Las recomendaciones del Servicio Meteorológico Nacional

Para poder interpretar el pronóstico trimestral, el organismo recomienda tener en cuenta algunas consideraciones:

  • Las proyecciones climáticas de este informe refieren a condiciones medias y no contemplan “singularidades”, como oleadas de calor o de frío, bloqueos atmosféricos y otros condicionantes que producen cambios en la temperatura y las precipitaciones.
  • El pronóstico muestra la probabilidad estimada para cada categoría: superior, normal e inferior, en una región, pero no detalla los valores específicos de la variable pronosticada. De este modo, aunque se anticipen mayores posibilidades de bajas precipitaciones para una zona, esto no implica que no puedan ocurrir lluvias o que estas no sean localmente intensas.
  • Se sugiere consultar tanto el pronóstico diario como el semanal para informarse sobre los eventos meteorológicos de alto impacto.

Fuente: Infobae