El incendio en el Parque Nahuel Huapi lleva 35 días activo y ya afectó 6908 hectáreas
Brigadistas y recursos aéreos intensifican esfuerzos ante condiciones meteorológicas adversas que avivan las llamas.
El incendio forestal Los Manzanos, que afecta al Parque Nacional Nahuel Huapi en Bariloche, lleva 35 días activo. Las condiciones meteorológicas, con vientos de hasta 70 km/h y altas temperaturas previstas, complican los trabajos para contener el fuego, que ya ha consumido 6.908 hectáreas.
El domingo, un frente frío con fuertes ráfagas intensificó las llamas en las laderas noreste del Cerro Colorado y el Cerro Donat, donde se formaron columnas convectivas que avivaron el fuego. Aunque leves lluvias cayeron durante la noche, su impacto fue limitado debido al escaso efecto en el combustible fino de la zona.
Las brigadas han logrado contener el avance del incendio en áreas prioritarias como Laguna Quetro y Los Manzanos, lo que ha evitado que las llamas afecten a poblaciones cercanas como Cascada Los Alerces. Sin embargo, en zonas de difícil acceso, como la ladera noreste del Cerro Colorado, el combate terrestre es inviable por razones de seguridad, por lo que los esfuerzos se concentran en ataques aéreos con aviones anfibios que operan en los lagos Los Moscos, Steffen y el Brazo Tronador.
Actualmente, 35 brigadistas trabajan intensamente en Laguna Marcia, una de las áreas más activas, mientras que en Lago Los Manzanos, los esfuerzos se centran en la zona alta del Cerro Alcorta, donde 29 brigadistas y personal logístico realizan tareas de contención y monitoreo.
En el Cerro Bastión, el fuego no ha avanzado más allá de áreas previamente quemadas, y en Lago Martín, no se registra actividad en la margen derecha. En Cascada Los Alerces, un equipo de 8 brigadistas del SPLIF, apoyados por un guardaparque, un meteorólogo y un operador de drones, continúa con tareas de enfriamiento en una línea de defensa de 1.200 metros.
El trabajo estratégico de brigadistas, apoyado por recursos aéreos y monitoreo, ha sido clave para evitar la propagación de las llamas hacia áreas pobladas. No obstante, las condiciones meteorológicas adversas, con altas temperaturas y baja humedad previstas, representan un desafío constante para el control del incendio.
Fuente: Diario Río Negro