La semana pasada se supo que el cocinero de la ciudad de Esquel, Claudio Jaramillo, se consagró campeón mundial de la empanada de carne en una nueva edición del “Campeonato Mundial de la Pizza y la Empanada”, evento organizado por la Asociación de Pizzerías y Casas de Empanadas (APYCE).

El Campeonato se llevó a cabo en el marco de la FITHEP Expoalimentaria Latinoamericana 2024, en el Centro Costa Salguero de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires durante los días 3, 4, 5 y 6 de junio. El evento contó con 174 participantes de 14 países durante las 4 jornadas de competencias.

En esta ocasión Jaramillo se impuso en la categoría de empanadas de carne argentinas. El jurado especializado evaluó los rellenos más exquisitos, las técnicas de repulgue y los secretos más guardados.

Regresó a la ciudad con su trofeo y contó los detalles de esta nueva consagración gastronómica. En principio, Jaramillo se mostró orgulloso de haber podido traer este premio a la ciudad: "Es un gran orgullo tener este título en casa".

El Campeón Mundial de la Empanada regresó a Esquel: "es un gran orgullo tener este título en casa"

Vale señalar que desde el año 2022 viene compitiendo y obtuvo varios premios. Ganó el Campeonato Nacional de la Empanada y el primer puesto en Pizza a la Piedra. En el 2023 fue por el Sudamericano y ganó en la categoría Pizza Gourmet.

“Nos quedaba la última etapa que era el mundial y gracias a Dios nos pudimos traer el título a la mejor empanada”, señaló Jaramillo. En ese marco, valoró los productos de la región patagónica, que posibilitan realizar elaboraciones exquisitas.

Contó que el corte era a elección pero debía ser vacuno. En su caso, eligió arañita que es un corte que sale de la cadera del animal. Sobre esto, indicó que fue el único que presentó este tipo de carne y la elección fue con el objetivo de “cautivar al jurado”. 

En esa línea, afirmó que la particularidad es que es un corte tierno y que tiene vetas de grasa, lo que hace que la empanada quede jugosa. Además, la carne fue cortada a cuchillo y tuvo una cocción de 4 horas con un vino de la zona.

Jaramillo indicó que el objetivo es “contrastar los sabores de la carne con el vino y la masa. Todo tiene que ser una armonía en un solo bocado”.

Por último, agradeció a todos aquellos que le brindan su apoyo y valoró las posibilidades que genera este tipo de consagraciones a nivel gastronómico y que le permiten seguir creciendo: “se abren muchas puertas”.